Ulrikke Hoyer ha denunciado en una publicación en Instagram que le sugirieron que se alimentara solo con agua durante 24 horas
La modelo Ulrikke Hoyer ha denunciado en su cuenta de Instagram que la firma Louis Vuitton la ha despedido un día antes de desfilar por estar “gorda”. La danesa, que lleva una talla 34-36, acusa a Alexia Cheval de decirle que tenía “la cara y el estómago demasiado hinchado” y que las próximas 24 horas “solo podía ingerir agua”.
Según ha relatado en la red social, la joven viajó a Tokio para participar en el desfile crucero donde la firma lanzaría su nueva colección. El día antes fue rechazada porque su cintura ‘había aumentado 0’5 centímetros’. Hoyer asegura que el motivo de la denuncia no es que la hayan despedido «Lo que no puedo aceptar es la “normalidad” en el comportamiento de las personas que encuentran placer en humillar a mujeres jóvenes. No sé si esto es un problema de las firmas o de los encargados de ‘casting’, pero lo cierto es que las prendas de estos desfiles están hechas para mujeres que tienen desórdenes alimentarios. Mirad el desfile y juzgad por vosotros mismos: incluso los pantalones más ajustados les quedan sueltos a las modelos»
La joven no daba crédito a las palabras de la asistente de casting, Alexia Cheval, y asegura que a la hora del desayuno revisó si la modelo tenía algún plato de comida en la mesa. Cheval aseguró que ella nunca ha dicho eso, afirma que «se dijo a todas las modelos que bebiesen agua en vez de Coca-Cola o alcohol para evitar el jet lag y la deshidratación. Nadie le diría nunca a nadie que no comiese. Eso no es cierto.»
Hover tiene una carrera envidiable tras haber desfilado para Louis Vuitton, Valentino, Versace, Hugo Boss, John Galliano y Elie Saab y haber colaborado en publicaciones como Vogue, W Magazine y Dazed & Confused. Sin embargo, no es la única modelo a la que han rechazado por su talla, la talentosa Gigi Hadid también fue duramente criticada por llevar una talla 36 en 2016.